viernes, 24 de octubre de 2014

PACTEMOS ENTRE NOSOTROS

Ya urge hablar de otra cosa, no por indiferencia, sino porque el problema esté resuelto. Pero la magia es una ilusión, es un juego de espejos, la rapidez de las manos, el engaño del ojo, el asombro de la lógica, pero no es lo que necesitamos. Tampoco basta la simple voluntad, es cierto que se cuentan por millones los mexicanos que rechazan las transas, que se pueden dar el lujo y la dignidad de trabajar honestamente, de apegarse a normas justas de convivencia, que siguen pensando que abusar del otro no está bien porque se abre la puerta a que los sinvergüenzas abusen de uno. Esa es la reserva humana que puede hacer que los problemas se resuelvan cada que se presenten, es una lucha de nunca acabar pero que se puede hacer. “La corrupción política le da el incentivo a la delincuencia organizada a ser violenta. Porque grupos criminales intentan captar a diputados, a senadores, alcaldes, a gobernadores y los usan para aniquilar y neutralizar a sus grupos adversarios. La policía de un estado asesina a los políticos y a criminales pertenecientes a grupos adversarios. Cuando Sinaloa usa a la policía de Durango, por ejemplo, para asesinar a los Zetas. Y los Zetas utilizaban a la policía de Tamaulipas para asesinar en Sinaloa. Esa orgía de violencia está energizada por la corrupción política al más alto nivel. Si se acaba con la corrupción política y se comienza a atacar patrimonialmente a esos grupos criminales, se vuelven más pequeños, como sucedió en Colombia. ¿Cómo se traduciría esa situación en México? Quedarían unos 300 o 400 grupos pequeños que ya no tendrían la capacidad de enfrentarse al Estado mexicano de igual a igual y de generar este tipo de masacres masivas, que son crímenes de lesa humanidad en donde políticos están involucrados. Eso tiene que generarse a través de un movimiento masivo en México, no quemando edificios de Gobierno. Esto no se soluciona con violencia porque así se le da la excusa a las autoridades corruptas para reprimir, para sacar el ejército a la calle y a matarlos. Esto se soluciona con un movimiento social pacífico, en donde medios internacionales como CNN y Deutsche Welle estén al lado viendo cómo la población presiona e intenta rescatar a su Estado, de limpiarlo de esta podredumbre que se tiene en México.” La opinión es de alguien informado, que sabe de la historia y desarrollo de la delincuencia organizada en diferentes partes del mundo, que se apasiona en rastrear las soluciones y que no se deja engañar fácilmente. Es Edgardo Buscaglia entrevistado por la agencia alemana de noticias Deutsche Welle http://aristeguinoticias.com/2010/mexico/en-mexico-hay-un-pacto-de-impunidad-entre-politicos-dice-buscaglia-a-la-tv-alemana/ Nuestros analistas e intelectuales también ven la gran porquería en que se ha sumido la clase política y lo han estado denunciando permanentemente, algunos han sido involuntarias y sorprendidas víctimas; es cierto que no se puede administrar el infierno como dice Javier Sicilia que el PRI pretende hacer. Se denuncia que nuestro gobernantes tampoco se sustrajeron a la tentación de transformar al cacareado Pacto por México en un pacto de impunidad como señala Jesús Silva-Herzog Márquez, en donde toda la clase política, sin importar el partido ni el poder gubernamental en el que se supone que trabaja, se convierte en aliada para cometer cuanta ignominia se le ocurre; en lugar de ejercer una sana vigilancia los unos de los otros, en ese anhelado equilibrio de poderes que caracteriza a una democracia. Esos millones de mexicanos que hacen bien las cosas, por convicción, por solidaridad, por el mero hecho de vivir bien sin hacer daño a nadie, se merecen otra cosa. Y sí hay alternativas fuera del modelito que nos presentan como el único posible, allí están las experiencias probadas, pero necesitamos creerlo: “cuando los hombres y la mujeres no creemos en algo es lo más desastroso, porque este animalito que somos es de lo más utópico y necesita creer en algo […] cuando no se cree en algo, se vive para uno, en el egoísmo. Las utopías son que se puede construir un mundo mejor, lo debemos hacer entre todos y defender a la vida. Vivimos en una vida hermosa que hay que cuidar”. No lo dice un ilusionista que busca engañar a la gente, es el presidente uruguayo José Mujica en http://aristeguinoticias.com/2210/entrevistas/a-los-que-les-gusta-la-plata-hay-que-correrlos-de-la-politica-son-un-peligro-mujica-en-cnn/ Los tantísimos muertos, desaparecidos, levantados, extorsionados, explotados, engañados, envilecidos, victimizados ―sin olvidar que muchas son mujeres, pero se usa el masculino por una simple regla del lenguaje que se puede cuestionar―, no pueden ser en vano. Mal haríamos si no utilizáramos ese dolor, su recuerdo, su vida, como motivo para hacer nuestro mejor esfuerzo para detener el caos que beneficia a unos poquitos, que se van a defender con todos los medios al alcance de su falta de ética y humanidad. Que no nos pase lo que en otras oportunidades perdidas “Hoy tienes a la sociedad civil en las calles mexicanas haciendo un acto de asco, porque es un asco la situación mexicana hoy en día, pero en pocas semanas vas a tener a la sociedad civil mexicana comprada por el PRD o por el PAN o por el PRI en donde les empiezan a dar contratitos” http://aristeguinoticias.com/0910/mexico/epn-tiene-el-mismo-rol-que-calderon-es-coordinador-del-pacto-de-impunidad-buscaglia/ Una vida bien vivida deja aprendizajes valiosos, que lo diga un viejo como José Mujica es creíble por congruente “pero en la política tenemos que separar. A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política, son un peligro en la política. Lo cual no quiere decir que en la política no existan intereses, pero son intereses no materiales, son morales, lo que se apetece es el cariño y reconocimiento de la gente. La política es la lucha por la felicidad de todos”. Ese sería nuestro pacto.